Muchos partieron este año. El propio 2016 está a punto de partir, en tan solo unas horas, para no volver jamás. El tiempo vuela, pero nunca hacia atrás. Uno de los que dejaron su cuerpo terrenal, de carne y hueso, fue Leonard Cohen, y fue de quien sentí más la partida. Tras muchos años de escuchar su voz a diario, de leerlo y releerlo, de verlo a través de imágenes en internet, en libros, el saber que ya no estaba más en este mundo fue un golpe.
No es difícil explicar el dolor de la partida de una persona que no está a tu lado físicamente, pero que sí está contigo cada día. Sonidos, letras, imágenes, anticipaciones.